Aitana Fernández paseaba con orgullo la luz de su cirio que iluminaba al Señor de la Salud el pasado día 11 de enero. El frío apretaba y la noche no estaba para muchos paseos. Sin embargo, ella no parecía sufrir la dureza del fresco y la humedad. Bien merecía la pena acompañar a su Señor de la Salud a la Catedral jerezana para que la Agrupación de San Rafael fuera erigida como Hermandad. Al día siguiente, con tanto o más frío todavía, Aitana volvía al redil. Muy cerquita de la portentosa imagen de Jesús aceptando la cruz, llevada por su padre en el carrito donde habita, Aitana volvía a iluminar como nadie el sendero por donde habría de caminar el Señor, auténtico brocal de devoción no sólo ya en El Chicle, sino en todo el Jerez cofrade y no cofrade.
Aitana padece desde nacimiento una mielomeningocele (espina bífica)
e hidrocefalia. Lleva en sus pequeñas espaldas ya 20 intervenciones quirúrgicas y no hay más remedio que vivir sobre las cuatro ruedas de una silla.
Si en su colegio ya tuvo que sortear todo un sendero de problemas para la colocación de un ascensor para poder acudir a clase como cualquier otro alumno más, ahora, el problema se centra en su domicilio.
En una segunda planta con sólo escaleras, en su bloque de viviendas se precisa un ascensor para que Aitana pueda seguir llevando una vida normal.
Su hermandad de La Salud de San Rafael ya comenzó ha movilizarse con una campaña llamada “Jerez con Aitana”. El Señor no podía dejar de echar una mano en ese hogar donde realmente se necesita. A partir de que la Hermandad de San Rafael se pusiera manos a la obra, se han sumado peñas flamencas, colectivos, asociaciones de vecinos y hasta partidos políticos.
Usted, querido lector, también puede ayudar a Aitana. Existe una cuenta abierta en las oficinas de La Caixa en la Corredera. Este es el número de cuenta 2013 1545 35 0200480908.